EL ESTADILLANO PINTADO POR FRANCISCO DE GOYA
En este
artículo, más que hablar, quiero recalcar que el mejor pintor de
retratos, español de finales del siglo XVIII y principios del XIX, Francisco
de Goya, retrató en 1788, al estadillano
Ilmo. Sr. José de Cistue y Coll, vestido con la toga y la golilla de la
judicatura, sobre el pecho porta la cruz de Carlos III, portando en la mano una
carta o documento. Dicha imagen me fue cedida por el Museo de Goya. Colección Ibercaja-Museo
Camón Aznar, para publicarla en este blogs y al cual le estoy enormemente
agradecido. En la mano de retratado se puede ver el nombre del mismo.
Ilmo. Sr. Josef de Cistué y Coll, baron de Menglana |
Detalle del documento |
El nieto e
hijo de estadillanos, llamado José de Cistué y Coll, Baron de Menglana y nacido también en Estadilla, fallecido en Zaragoza en 1808 y el día de su muerte los describe de la
siguiente manera la Gazeta de Madrid del día 11 de Marzo de 1808 de la
siguiente manera:
El día 1. °
de enero del presente año falleció en Zaragoza, a los 82 años cumplidos de su
edad, el Ilmo. Sr. D. Josef de Cistue, barón de la Menglana, caballero
pensionado de la distinguida orden de Carlos III, ministro jubilado del consejo
y cámara de Indias, y de la junta general de comercio, moneda y minas. Después
de haber seguido con el mayor lucimiento su carrera de catedrático en la
universidad y colegio mayor de S. Vicente de Huesca, sirvió a S. M. por espacio
de 50 años, de los cuales pasó 20 en ambas Américas con los empleos de fiscal
de la audiencia de Quito, oidor y fiscal de la de Guatemala, alcalde del crimen
, y oidor de la de México; exponiendo su vida en la primera ciudad al más
inminente peligro con motivo de las turbaciones de 1765 , padeciendo largos
trabajos en la segunda al tiempo de su ruina y traslación, y desempeñando en
los territorios de los tres tribunales a costa de fatigas y penosos viages
muchísimas comisiones mui interesantes al servicio y hacienda de S.M. Desde que
en 1777 fue nombrado fiscal del supremo consejo de Indias, sirvió las dos
fiscalías por largo tiempo en varias vacantes; y tanto en ellas, como en los
negocios de la real cámara, y de la junta de comercio y moneda, en la comisión
para examinar el tratado militar sobre materias de justicia del ejército y
milicias de España é Indias, y en otros encargos de la más alta importancia,
acreditó siempre su ardiente e ilustrado zelo por la prosperidad de la religión
católica por los derechos y regalías de S.M., por la actividad y exactitud en
la administración de justicia , y por el bien de la monarquía en ambos mundos.
La rectitud de su carácter, la pureza de sus costumbres y la dulzura de su trato
hicieron que fuese respetado y amado en todas partes, y hacen ahora mui sensible
su pérdida.
Imagen cedida y propiedad del Museo Goya Colección-Museo Camón Aznar