miércoles, 6 de julio de 2022

EL TELEFONO

 LA INAUGURACIÓN 

DEL TELÉFONO EN ESTADILLA


No podemos dejar de olvidar como fue nuestra inauguración del teléfono en Estadilla el día 18 de Julio de 1960 y por ello quiero recuperar de la hemeroteca del Diario del Alto Aragón, aquel articulo que no pudo explicar de mejor manera aquel día festivo.

APOTEÓTICO RECIBIMIENTO EN ESTADILLA

Estadilla, que había mostrado en el transcurso de los últimos años fervientes deseos de poseer teléfono, se encontró que, en el plazo de ocho días, se habían realizado los trámites precisos, y la centralita, para diez conexiones y hasta treinta teléfonos, estaba a punto de servicio en esta fecha gloriosa para todos y especialmente memorable para la villa. Por eso el vecindario en pleno y creemos que gran cantidad de personas procedentes de pueblos próximos, estaban dispuestos a celebrar el acontecimiento de forma que no hubiera precedentes. Y en efecto, así fue. Dos kilómetros antes del pueblo, hileras de motoristas primero, tractoristas después y finalmente camaradas ciclistas del Frente de Juventudes, perfectamente uniformados y expertamente adiestrados, escoltaron el coche donde viajaban el gobernador y el prelado hasta la plaza que da entrada al pueblo. Ya antes de llegar, los lados de la calzada estaban abarrotados de público que no cesaba de vitorear al señor Riera y en la plaza una ingente masa humana, fervorosa y agradecida, le aclamaban sin cesar. Todos pugnaban por acercarse a la primera autoridad, creando con ello imponentes oleadas que desplazaban a los acompañantes hasta los lugares más apartados. Nosotros, por ejemplo, en menos que canta un gallo, nos encontramos a doscientos metros del señor Riera y sin poder, en manera alguna, abrirnos camino. Resignados tuvimos que seguir con la avalancha hasta el lugar donde está instalada la telefónica, pudiendo, no sin grandes trabajos, llegar a pisar el patio de la misma, pero cuando ya se había celebrado el acto inaugural. Diremos de paso que las plazas y las calles estaban materialmente cuajadas de colgaduras de toda especie, luciendo el sol que aplanaba su alegre policromía. Había instalados numerosos arcos, con inscripciones como las siguientes: "Un gobernante, Riera". "Por gratitud y afecto, estamos con vuecencia". Las calles ofrecían el aspecto de un túnel, pues así de espesas estaban las colgaduras de papeles y banderolas, que iban de unas a otras casas.

Imagen de Pixabay.com
Las orquestas, tan abundantes en este pueblo de músicos, que ya habían recibido al gobernador con el himno nacional, seguían interpretando diversas composiciones y en fin, para no ser prolijos; diremos que ya en la Casa Ayuntamiento, una rondalla dedico a su excelencia coplas alusivas. Hecho por fin el silencio, un niño, Ramón Cereza, adelantándose al micrófono, leyó, con voz clara y perfectos matices, una poesía original de Teresa Ramón, dedicada al gobernador, que emocionó a todos, y que por su belleza publicaremos cualquier día, que estemos mejor de espacio.

Seguidamente, al alcalde, señor Peirón, pronunció un discurso para agradecer la visita y la mejora lograda.

Le sucedió en el uso de la palabra el delegado regional de la Telefónica, que hizo historia de los trabajos hasta la ejecución de la obra y anunció la instalación de otras centrales en la provincia.

Por último, el gobernador civil pronuncio un bellísimo discurso, agradeciendo el emocionante recibimiento, la gentileza de la poesía y felicito al pueblo de Estadilla. En el extenso parlamento, el señor Riera dedico frases de gratitud al consejero-delegado de la Telefónica, señor Clará, que con tanto interés mira las cosas de Huesca y anunció el plan de 220 teléfonos que en breve plazo serán montados en pueblos.

Momentos antes de la despedida, unas niñas vestidas con traje típico regional, ofrecieron al señor gobernador varios cestos de frutos y dulces.

Con las mismas muestras de cariño, entusiasmo y adhesión que a su llegada, fueron despedidos la primera autoridad provincial y el prelado de la diócesis.

 

Inaguracion: Foto de Maria Jesus Cera

En otro de sus artículo lo expresa de la siguiente manera:

Como símbolo de estas virtudes, hemos de destacar el recibimiento de Estadilla, ese pueblo situado en las orillas del Cinca, cuya suprema aspiración era la de contar con el servicio telefónico. Allí, hombres curtidos por los rigores del campo, campesinos jóvenes, mujeres y niños, se habían congregado horas antes de la llegada de la caravana para ser los primeros en el agradecimiento y en el afecto. Toda esta enorme multitud, al anunciarse el feliz arribo del señor Riera Aísa, prorrumpió en una de las aclamaciones más formidables de que tenemos memoria. Allí no había protocolo ni rigideces formalistas. Era la expresión completa de unos sentimientos que en su fortaleza y sinceridad no admitían formulismos de ninguna especie. Hablaban los corazones a sus anchas; hablaban los sentimientos más puros que el hombre puede experimentar, estableciéndose un contacto, una mutua comprensión en las que las palabras sobraban. Y un, verso romance, debido a la musa de Teresa Ramón, dicho por un niño, puso la nota emotiva y fina del acto de Estadilla.


La recuperación de este artículo, fue gracias a nuestra amiga Maria Jesus Cera, que después de preguntar , si alguien se acordaba de alguna fecha en concreto de algun hecho historico de Estadilla, ella nos dijo lo siguiente: que la centralita del teléfono estaba instalada en una casa particular en la calle Mayor, esa era, la casa del señor Joaquín Bafaly y la llevaban entre su esposa y el. Pusieron un total de 30 aparatos para todo el pueblo,y en su casa en concreto le pusieron un teléfono con el número 26. En una población de más de 1500 personas .


Hemeroteca del diario del alto aragon 

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